miércoles, 18 de noviembre de 2015

CUANDO EL AZÚCAR NO ES TAN DULCE:

Que tomar azúcar no es bueno lo sabemos todos. Que engorda, produce caries, puede llevar a la diabetes, es algo por todos conocido y que si lo consumimos de manera equilibrada, no tiene por qué causarnos ningún mal, también.

El consumo de azúcar procesado puede causar males tales como: dolencias cardiovasculares, asma, candidiasis, daños en el hígado, envejecimiento de la piel, además de las que he mencionado anteriormente.

Evidentemente, no tengo ninguna intención con este post, de hacer un alegato en contra del azúcar procesado, pero si pretendo hacer ver una situación que me incomoda:

¿Por qué si una persona decide no tomar azúcar, tiene que vérselas y deseárselas para poderlo llevar a cabo? Por qué tenemos que encontrarnos en casi todas las etiquetas de los alimentos el dichoso azúcar? ¿Por qué tenemos que estudiarnos todos los palabros que en realidad significan “azúcar”, pero lo ocultan?

El pan de molde blanco o integral, la salsa de soja, el salmón ahumado, los fiambres envasados, las salchichas, los pimientos del piquillo … y un sinfín de alimentos, tienen azúcar o alguno de sus derivados, sin tenerlo que llevar.

Tanto las compañías alimentarias como las farmacéuticas, dan volumen a sus productos y consiguen que tengan mejor sabor o al menos más adictivo para vender lo máximo posible, y es por este motivo por el que encontramos azúcar en alimentos que no deberían llevarla.

Al ser una sustancia que aporta energía de manera inmediata y calma la ansiedad de manera momentánea, va creando una adicción que hace que poco a poco vayamos comprando una marca y no otra en función de esta variable.

De todas maneras, tampoco tenemos que preocuparnos mucho porque el consumo excesivo de azúcar, ya se ha convertido en un problema económico (que al final es lo único que importa), ya que los problemas de salud que está acarreando cuestan miles de millones de gasto sanitario, por lo tanto, ahora pasaremos al polo opuesto, y el que tome azúcar será un apestado más que se unirá al grupo de los que fuman.

En cualquier caso, creo que es interesante saber que el hombre ha vivido sin azúcar (procesado), sin que le ocurriera nada durante siglos. Se tiende a pensar que algo de azúcar siempre es necesario cuando no es cierto. Lo que el ser humano necesita es glucosa, y ésta la podemos encontrar en la fruta, las legumbres y los cereales, por poner algún ejemplo.

En la actualidad solemos tener unos niveles de azúcar en sangre por encima de lo saludable, y esto hace que disminuya nuestra sensibilidad a la insulina, con lo cual resulta más complicado bajar esos niveles de azúcar, y por este motivo cada vez hay más gente con diabetes en edades más tempranas. Nuestro páncreas está agotado el pobre, y el hígado también lo sufre.

El que esté acostumbrado a tomar mucho azúcar, tiene más complicado dejarlo, puesto que es adictivo, ya que ayuda a generar serotonina, que influye positivamente sobre el estado de ánimo. Pero el que lo consigue puede notar que mejoran sus niveles de energía, mejora ese estado de ánimo de forma natural, porque una vez que se deja de tomar este alimento, el páncreas empieza poco a poco a regular sus niveles de insulina, segrega solamente la necesaria, y por tanto se dejan de tener bajones de azúcar.


¿Y cuál es la alternativa? En mi opinión ninguna. Creo que no pasa nada por tomar azúcar de vez en cuando, eso sí, si quiero algo dulce, pero no cuando la receta no lo requiera, encontrar que el producto tiene sucrosa, dextrosa, malta, jarabe de maíz, melaza, o yo que se cuántas cosas más.

El azúcar más sano y que todos conocéis es el azúcar morena (ahora conocido como “azúcar moreno” desde que apareció nuestro dúo de gitanicas cantando “tus ojos bandidos”), pero ¡Ay señores que ésto también tiene trampa! El azúcar morena que compramos en supermercados y grandes superficies, suele ser azúcar teñida. Si queremos comprar azúcar morena de verdad, tenemos que comprobar que es pone “azúcar integral” y yo recomiendo comprarla en herbolarios para que no os tanguen. Se distingue muy fácilmente, y es que es mucho más oscura, y al ir al removerla o ir a servirte una cucharada, verás que el grano está menos suelto y da la sensación como si se moviera (así explicado no queda claro, pero en cuanto lo vayáis a comprobar entenderéis de qué os hablo).

Y para no seguir amargando la vida al personal, me despido con un dulce hasta luego!